Lo que hace único a este restaurante es su larga historia en la isla y su compromiso con la auténtica cocina tradicional de Ibiza. Además, el ambiente acogedor y la atención personalizada hacen que cada visita sea una experiencia especial.
En este restaurante se pueden encontrar platos típicos ibicencos como el arròs de matances y el sofrit de payés, que son muestra de la auténtica comida tradicional de la isla. También ofrecen carnes a la brasa y una variedad de postres tradicionales.
En la actualidad, el restaurante está dirigido por las dos hijas del fundador, Lucía y Carmen, quienes han crecido junto a la cocina y se encargan de mantener la identidad y la calidad que han hecho de este restaurante un lugar único en el mundo.
El restaurante fue abierto en 1973 por Antonio Marí, quien gracias a su reconocida labor ha convertido este lugar en un emblema y punto de referencia de la cocina tradicional ibicenca. Desde entonces, ha sido un lugar de renombre tanto a nivel nacional como internacional.
Al visitar este restaurante, se puede esperar una experiencia única y auténtica, donde cada persona es tratada de manera especial y se puede disfrutar de la mejor comida tradicional de Ibiza en un ambiente acogedor y familiar. Además, la posibilidad de encontrarse con personajes famosos añade un toque especial a la experiencia.